MUNDOS NOCTURNOS – Episodio 2. Observación de Pardelas Cenicienta con HIKMICRO

La oscuridad conlleva peligros, pero también trae increíbles oportunidades. Mundos Nocturnos, acompáñame en esta serie donde usando las nuevas tecnologías podremos escudriñar la vida íntima de la fauna y descubrir todos sus secretos. Vamos juntos a adentrarnos en la oscuridad, vamos juntos a descubrir Mundo Nocturnos.

En esta ocasión pongo rumbo sur: Me voy a la Macaronesia en concreto a la isla de El Hierro. Voy a estudiar en vuestra compañía y a descubrir un visitante muy especial de esta isla, un viajero remoto, que como yo, cada cierto tiempo vuelve a estas preciosas islas del archipiélago canario para descubrir sus secretos.

No hablo de otro animal que no sea la Pardela Cenicienta, un increíble e incansable viajero que recorre todo el Atlántico en un sin parar hasta que necesita reproducirse. Cuando necesita reproducirse se acerca a las costas del Hierro y es este momento con la llegada de la primavera cuando ella se acerca a tierra, donde estaré esperándola para compartirlas con todos vosotros.

Para realizar esta expedición voy a valerme de la más moderna tecnología voy a hacer uso de un visor térmico para poder localizar en la noche las pardelas a su llegada a tierra, ellas utilizan los acantilados rocosos para nidificar y es en este momento donde haciendo un sonido bastante estridente y realmente terrorífico se acercan a tierra aterrizando de una manera bastante torpe y acercándose a las madrigueras o pequeños agujeros que les sirven como nido.

Es ahí donde utilizaré el visor térmico para localizar las colonias, localizar el punto exacto donde están arribando y están llegando para posteriormente, ir durante el día e infeccionar sus nidos que supongo encontraré totalmente solos ya que la pardela pasa todo el día pescando y solamente regresa para cuidar del huevo o alimentar sus pollos.

Tras pasar el invierno en Sudamérica, la pardela hace un increíble viaje y regresa en primavera a las costas rocosas de las Islas Canarias. Pasan el día completamente en alta mar pescando capturando pequeños peces para alimentar a sus polluelos que se albergan en nidos y en nichos rocosos en la parte alta de los acantilados.

Los padres de este polluelos tienen que recorrer cientos de kilómetros para localizar bancos y cada vez es más difícil pescar en aguas del Atlántico, pues las poblaciones de peces debido a innumerables problemas como la contaminación o la pesca indeterminada se han visto cada vez más mermadas.

Tras pasar el día pescando, las aves con los buches llenos tanto machos como hembra regresan a alimentar a sus polluelos que han esperan en los nichos rocosos haciendo un ruido estridente para llamar la atención de ssu padres.

Es en este momento cuando las pardelas empiezan a emitir esos chillidos que se acercan a la costa, donde utilizaré un visor térmico de Hikmicro para poder localizar el cuerpo cálido de la pardela en el aire, una tarea cuando menos difícil porque vuelan de forma muy rápida. Ya cuando están en tierra la diferencia de temperatura hace que sea un poco más difícil localizarlas.

Tardaré un poco hasta que la pardela entra en calor y se iguale a la temperatura de la tierra. Sin embargo, en el aire es muy fácil localizar el cuerpo cálido de la pardela. En tierra, por la diferencia de temperatura que existe al venir del mar vienen un poco más frías que las rocas volcánicas del entorno donde nidifican. Entonces, me será un poco más difícil el localizar el nido y tendré que explorarlo con la llegada de la mañana, en el día.

La pardela utiliza su olfato para regresar al nicho y su aterrizaje es totalmente aparatoso, ahí podré ver un poco haciendo uso del visor térmico de visión térmica, podré ver exactamente el sitio donde aterrizan en este momento aparatoso, dificil, cuando ella toman tierra.

Después, me será un poco más complicado pues se meten en su nicho rocoso en su cueva y me cuesta mucho más localizarlas. Una vez las pardelas han llegado a tierra no se quedan en silencio, sino que saludan a sus vecinos y arman escándalo saludando a sus pollos y sus pollos gritan desde dentro de las oquedades llamando a su padre y pidiéndoles de comer. Un espectáculo de la naturaleza cuando menos curioso.

Antes del amanecer, bastante antes de amanecer, en torno a las cuatro de la mañana; las pardelas empiezan a prepararse: vuelven a estirar sus alas para marcharse al mar. En esta ocasión lo hacen de forma un poco más silenciosa. En la mañana es algo más perezosa y la pardela está un poco más callada. Sin embargo, rápidamente se adentran y desaparecen de los niños dejando a su pollo con sus huevos totalmente solos.

Como se dice en Canarias, el pollo de pardela se va por San Juan, cuando llega el verano que ha pasado los tres meses de primavera, el proceso y periodo de cría de la pardelas Cenicienta culmina exactamente en el día de San Juan, todos los pollos que han conseguido sobrevivir elevan y se despegan de la isla para volver el próximo año a criar en la zona en la que han nacido. Pasarán el año dando vueltas por el Atlántico donde llegarán a lugares tan distantes como Ciudad del Cabo en Sudáfrica o la Patagonia, Argentina y volverán a Canarias o a otras islas como Madeira o Azores para criar y reproducirse. Así que, esta aventura que ejerce la pardela cenicienta es uno de los viajes más grandes y apasionantes de un ave alrededor del planeta.

[Música] [Maykol García Camina por la costa]

He decidido volver al nido que encontré ayer a ver cómo ha ido evolucionando: si hay algún cambio, si veo más huellas, si han traído material nuevo para el nido, si veo más rastro… He notado que anoche han entrado varias este mmm no han sido demasiadas donde algunos… [Maykol se tropieza] Perdonad, tengo que ir atento porque si no las caída tiene lo suyo. Creo que la caída no me conocería ni mi madre, tengo que tener mucha precaución.

Al fin he llegado, vamos a ver voy a ir por aquí mirando a ver en los nidos que he encontrado. Aquí he encontrado varios, si hay que de uno que estaba como empezado que tenía algo de material y demás, pero bueno la zona se ve que anoche entraron bastante y defecaron y hay bastantes indicios de que han estado por aquí así que vamos a ver.

Como veis, pues hay más restos de heces, se ve que han defecado por aquí en la noche y bueno veo que hay inclusive en la zona más nichos más agujeros donde podrían perfectamente estar nidificando.

De hecho, se ven las heces aquí en toda la entrada y bueno vamos a mirar este nuevo nido o agujero que he encontrado, a ver si somos capaces de ver algo. Se ve solamente que hay heces en la parte interior del nido.

Bien como veis, hay bastante caca en el entorno, aquí también y se ve un poco la entrada de la ura  y mirad: ¡Un huevo! ¡Qué alegría! [Maykol se ríe] ¡Qué alegría! Un huevo, miradlo.

Vamos a verlo desde aquí: ¡qué bonito, qué bonito! Un único huevo, señal inequívoca de que nuestra amiga la pardela ha estado por aquí. Así que, maravilloso. Bueno, me parece que este pollo va a tener más éxito al tener estas vistas que ahora mismo comparto con vosotros ¡Increíble! [Música]

Este pequeño animalito enfrenta grandes retos para su supervivencia: la verdad que me he encontrado con la triste realidad de que muchos pichones se mueren por inanición. Los encontramos muertos frente a los nidos y es un espectáculo cuando menos lamentable ver que estos animalitos mueren, pues porque sus padres no regresan a alimentarlos. No regresan a alimentarlo porque motivado a la contaminación y motivado a la pesca excesiva incriminada de especies que muchas veces le sirven de alimento a la pardela pues no consiguen comida para alimentar a sus pollos.

 Además de esto, enfrenta otros retos y otros grandísimas dificultades para poder salir adelante y sobrevivir como especie: en la urbanización de muchas costas no solo en Canarias sino en otras islas. Pues ha llevado a que haya muchísima iluminación, esta iluminación hace que los pollos de pardela en el momento que van a salir de los nidos, se golpeen, se lastimen, se pierdan, se extravíen y sean víctimas de choques lamentables contra este tipo de luces.

Desde aquí, la pardela enfrenta grandísimos retos para poder sobrevivir y para poder seguir adelante como especie. Mas sin embargo, esperemos que siga llenando los cielos nocturnos de Canarias de esos terroríficos y tan peculiares sonidos que tienen.

[Música][Los pájaros trinan]

Bueno amigos, ha sido una experiencia maravillosa encontrarme de nuevo con esta salvaje isla y con uno de sus habitantes, que siempre volverá igual que lo haré yo. Igual que lo he hecho yo en esta ocasión después de tantos años, la Pardela Cenicienta seguirá volviendo. Sin embargo, me encontré con difíciles momentos para ella. Creo que enfrenta grandísimos retos de supervivencia: los gatos, la iluminación, las construcciones humanas, la poca cantidad de peces que hay en el mar, la colonización de sus espacios naturales, el crecimiento poblacional de los seres humanos en la propia isla, es un gran reto al que se enfrenta. Sin embargo, creo que juntos utilizando las nuevas tecnologías al servicio de la ecología sistémica y de verdad seremos capaces de protegerla, cuidarla y seguir disfrutando de ella y oyendo esos mágicos murmullos en las noches herreñas. Hasta luego.

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